Fin del verano e invasión de papeles.

23:00 / Por Antonio / comentarios (0)

Hola a todos.

Bueno, primero disculpar el no haber actualizado el blog mucho (por no decir nada) últimamente. No es que haya habido viajes grandiosos y eso, pero sí que ha habido buenos momentos desde mi cumpleaños: Laura ha hecho su examen del First ( oral y escrito, para los cuales ha ido dos veces a España de forma fugaz) yo me he puesto a acabar la escritura de mi proyecto, hemos ido a diferentes lugares alrededor de Dublin, hemos disfrutado el sol en la playa y en parques... (eso sí que es disfrutar aquí jeje) y en fin hemos hecho cositas como siempre. Y es que desde mi cumpleaños, por cierto, ya ha pasado un mes. Joder el tiempo vuela, ya solo me quedan 11 meses para hacerme, de nuevo, más viejo.

Y es que desde que estamos aquí todo pasa rapidísimo, y se nos acumulan montones de experiencias, como si hubiese sido ayer cuando llegamos sin embargo. Esa imagino que será la magia de vivir en un lugar donde la monotonía no existe, siempre hay algo nuevo. Pero quizá así pasa la vida más rápido, como ví en un anuncio... de Vodafone creo que era, por aquí por Dublin: "It's not the years in your life what counts, but the life in your years." (Lo que cuenta no son los años en tu vida, sino la vida en tus años.) Genial, y por cierto no sé si os lo había comentado ya.

Pues como os decía, hace un par de semanas tuvimos un tiempo de miedo por unos días, sol y calor de veintitantos grados con cielo despejado. Eso es lo más de lo más que se puede pedir aquí, donde por cierto una vez que hace esas temperaturas, es incómodo andar por ahí porque hace calor en el bus y hace calor donde vayas, ya que aquí nada tiene aire acondicionado, excepto (algunas/bastantes) de las tiendas donde te gastas tu dinero por supuesto.

Así que algún día pues simplemente nos fuimos al parque o a la playa (a la orilla de la playa si señor) a tomar el sol y echar un rato, porque tomar el sol aquí es un deporte, y se puede hacer a cualquier hora, porque en ningún momento del día tu vida peligra si te pones al sol sin estar bajo techo. No como en España, donde puedes morir a ciertas horas si se te ocurre intentarlo jeje.

Pero claro la felicidad no es eterna, y tras ese buen tiempo... chanchaaaanannnnnnnnnn!!!!!!!


Que llueva, que llueva, la virgen de las cuevas...

El verano se acabó... y parecía que se había acabado para siempre a juzgar por el tiempo. Nubes y lluvia, aunque no frío, se cernían sobre nosotros. Además, a juzgar por lo que nos decían los lugareños sobre lo ocurrido en los últimos veranos, sólo había hecho una par de semanas de buen tiempo para después llover durante todo el verano y hasta septiembre, la cosa pinta fea. Con lo cual... asumimos que el verano se ha acabado, fue muy bonito mientras duró.

Así que bueno, tocaba currar, y en mi agenda más inmediata hay dos proyectos: estudiar la "bendita" última asignatura que me queda para acabar la carrera RSS (Redes Servicios y Sistemas)(si el nombre es largo, más lo está siendo el proceso de aprobarla) y terminar con el PFC. Lo primero por supuesto es clave, así que me puse a ello. Los papeles han vuelto a invadir mi vida, y eso me está consumiendo tiempo por supuesto. De hecho ha sido una de las cosas que me ha impedido escribir y contribuye a entretenerme el día completo.


Los papeles han vuelto a mi vida.

Así que bueno, hecho buenos ratos de estudio siempre que puedo en cualquier lugar: en casa, en el laboratorio, en la biblioteca... y me lo paso de lujo... vosotros me entendéis jeje. Pero es que además ya he (casi) (ese casi lleva ya dos semanas repitiéndose porque siempre aparece algo nuevo que retocar) he acabado de escribir mi proyecto. Porque ya había hecho todos los experimentos y diseñado los filtros y aprendido mucho, y llevado a cabo todo el proceso, pero ahora quedaba escribirlo. Y han salido 195 páginas de nada por el momento, todo escrito en inglés, describiendo todo el trabajo hecho y con un papel de investigación publicado, lo cual me dará opción a una matrícula de honor... que bien quedaría eso si cayese la breva... who knows. Pero la verdad es que está quedando realmente bien y estoy muy contento con el resultado. Ya lo veréis por supuesto, otra cosa es que os interese leer un 1% de él aparte de los agradecimientos jeje.

Además de eso, el trabajo sigue por supuesto, Laura currando cada vez más contenta y adaptada, rotando por diferentes unidades de los hospitales y conociendo cada vez a más gente aquí y allí. Y yo diseñando filtros y continuando la investigación de sistemas de transmisión, que la verdad que puedo decir que me sigue gustando mucho.

¡Ah! Se me olvidaba... cuando pensábamos que la lluvia nos iba a acompañar por un tiempo largo, hemos vuelto a tener buen tiempo, parece ser que el verano por estos lares es intermitente, pero se ve el sol suficientemente a menudo en los meses buenos. Asi que tenemos ratos para disfrutarlo, aunque la lluvia nos acompañe algunos días.

Y eso ha sido un poco lo que quería contaros hoy, a ver si me sigo inspirando en estos días (con tal de no estudiar uno se inspira con lo que sea, os lo digo yo...) y os cuento más cositas sobre lo que rellena nuestras vidas últimamente.

Un saludo a todos, y a disfrutar de vuestras vacaciones, que imagino que si no han llegado ya, estarán al caer, sobre todo después de esos temidos exámenes para los estudiantes.

Se despide el reportero más dicharachero de barrio Sésamo.

Adiós.

FLASHBACK IV: Glasgow.

22:17 / Por Antonio / comentarios (2)

Hola a todos.

Bueno, bueno, bueno... arreglando y mirando el blog me acabo de dar cuenta que el último episodio de flashbacks, relatos de los viajes de fin de semana que hicimos a varios lugares de Europa, se me había quedado olvidado en un cajón. Muy mal, muy mal, pero bueno, al ser flashbacks, pues he pensado que podría colocarlo ahora, aunque esté un poco "fuera de tiempo" pero igualmente es entretenido. Espero que os guste, porque éste fue EL VIAJE que hicimos los LADS juntos fuera de nuestra amada Ireland.

Éste flashback relata nuestro último viaje de Abril, a las tierras escocesas, concretamente a Glasgow. Ciudad fría y húmeda, con unos paisanos que hablan un ingleś más que "auténtico" y bastante chula la verdad.

Y es que lo auténtico viene porque tienen un acento supermarcado y es muy complicado de entender, aunque bueno, todo es acostumbrarse y no tuvimos demasiados problemas, mas que alguna que otra anécdota.

Cosa graciosa fue que Kai tuvo que pedir una visa para viajar al Reino Unido, y tras pasar todo el aeropuerto y salir por la puerta, nos quedamos anodadados... nadie había comprobado sus documentos. En el aeropuerto de llegada, Glasgow Prestwick, no había puesto de control, alucina, 100€ que le costó la visa para nada.


Lo que si que había en el aeropuerto eran tiendas de souvenirs que nosotros aprovechamos.

Tras un viajito de menos de una hora en tren hasta la ciudad de Glasgow, llegamos a nuestro hotel, moderno, limpio, con todas las comodidades y con tele, que necesitábamos para ver la carrera de Fórmula 1 a la mañana siguiente. Porque además Kai es un forofo y nos lo ha contagiado.

Así que tras un pequeño descanso, corrimos a explorar la ciudad. El centro es bonito, está cuidado y tiene bastantes cositas que ver aquí y allí. Galerías, plazas, iglesias, el ayuntamiento y su plaza... así que estuvimos un rato disfrutando del ambiente. Que por cierto es parecido a Dublín, pero más frío y húmedo, aunque por supuesto Dublín es mucho mejor.

La primera parada importante del paseo fue en la catedral. Me pareció preciosa, con una imagen típica de novela del siglo XVIII, lúgubre, con una colina/cementerio junto a ella, y ese estilo gótico que le daba una apariencia única.


La iglesia vista desde la colina.

La parte interior era especialmente bonita, con unas catacumbas que podían ser visitadas, un precioso altar y techos de madera que le daban una imagen mucho más solemne. Para colmo la entrada es gratuita, no sólo en la iglesia, sino en todos los lugares turísticos alrededor de la ciudad, cosa muy de agradecer. Lo que sí hay son unas urnas para hacer donativos, en los que por supuesto dejamos dinero, ya que nos parecía lo justo, pero es un detalle de agradecer que no te asalten primero y te dejen luego ver las cosas, así uno valora.


Techo de la catedral.


El cementerio, ubicado en la colina junto a la iglesia.

Como curiosidad que encontramos justo en el camino al cementerio tenemos esta foto.

¿Los muertos aún usan el coche?

Por la tarde seguimos visitando cosas. De las que más me gustó fue el "People's Palace" edificio/invernadero donde había una muestra de fotos antiguas de la ciudad, y un jardín tropical a cubierto con cafetería, una delicia para el día tan frío que estaba haciendo. Vamos que nos quedamos allí un buen rato, disfrutando de una temperatura de película a cubierto del frío.


La parte frontal del People's Palace.

Nuestra siguiente parada fue el estadio de los Glasgow Celtic. Equipo que tiene lazos con Irlanda, y no sabíamos muy bien porqué, hasta que hace pocos días mis compañeros de laboratorio me comentaron que es porque originariamente, el Celtic era el equipo católico y el Glasgow Rangers el protestante. Por lo cual se llevaban, y aún lo hacen, a muerte. Incluso en muchos pubs de Glasgow está prohibido llevar ropa o símbolos de alguno de los dos equipos, para evitar altercados.


Nosotros por supuesto nos hemos hecho del Celtic.

Al final de la tarde volvimos al centro de la ciudad, donde paseamos por las calles comerciales y nos empapamos del ambiente, con mucho músico alrededor y mucha animación. Incluso entramos a la Royal Concert Hall y pudimos oír música de orquesta en la recepción, donde había varios músicos tocando.


Vista de la ciudad al atardecer.

Y por supuesto los LADS tenían que hacerse la foto de rigor.



Tras el paseo volvimos al hotel, a cenar y descansar, para levantarnos pronto, ver la Fórmula 1 y continuar explorando la ciudad el domingo.

Y así fue que a las 10 de la mañana estábamos ya listos y montados en el metro, que nos llevaba a la parte oeste de la ciudad, el West End, barrio muy dinámico y con bastantes cosas que ver.


El pequeño metro, diseñado para gente "nomuyalta".

Y es que el metro es muy pequeñito, cuando esperas en la estación, solo puedes ver un tunel más bien pequeño y redondo (completamente redondo) por el que te preguntas si podrá salir el metro... y sale jeje.

Así pues fuimos al Kelvingrove Park, verde parque (como no puede ser de otra manera por estas latitudes, otra cosa no pero verde...) que esta al lado de la University of Glasgow, con lo cual se ven los bonitos edificios, y además nos dirigimos al museo Kelvingrove, galería de arte, y edificio muy bonito.


Museo Kelvingrove

Después seguimos paseando por el West End de la ciudad y a través del parque para encontrar...


¿Sabéis lo que es? Ja,ja,ja,ja,ja,ja...

Así que paseando paseando, pues echamos la mañana. Después, en la tarde, cogimos el metro de nuevo (casi 6€ cada viaje en metro, tiene tela la cosa, espero que los bonos mensuales y eso sean más baratos porque sino los Glaswegians lo tienen crudo) y nos fuimos a la zona sur del río, donde por deseo de Kai vimos el estadio de los Rangers (hay que ver los dos, no seamos partidistas).


Estadio de los Rangers.

Y después nos dirigimos a la zona junto al río, donde vimos varios edificios y lugares interesantes: el Glasgow Science Centre, un precioso edificio con muchas actividades dentro: museo, Imax, representaciones... Los característicos puentes sobre el río, y la ruta pintoresca que lo recorre, con parada en el centro de convenciones, también un bonito edificio, versión en pequeño de la Ópera de Sydney.


Centro de congresos.

Después nos relajamos un rato por el centro tomando algo, hicimos algunas compras y finalmente nos dirigimos al hotel, recoger maletas y a la estación de tren. De vuelta al aeropuerto y a nuestra Irlanda querida.

Llegamos muy tarde a casa, como buenos sacrificados viajeros, pero ya se sabe que sarna con gusto... jeje.

Saludos a todos.