Este finde ha servido para intercalar cositas que hacer con ocio. Para comenzar con la actividad el sábado por la tarde hemos ido a un pueblecito marinero pequeñito pero con encanto situado en una península al norte de Dublín llamado Howth.
La península en la que se encuentra es muy bonita. De hecho el conductor del autobús era un tío muy enrrollado y nos subió al centro de la misma, donde está la parte más alta, y donde se tienen muy buenas vistas mientras subes. Allí acababa la ruta del bus, así que tras unos minutos hablando con él, volvimos por donde habíamos venido y nos dejó en el propio Howth (que habíamos atravesado previamente) sin cobrarnos más ni nada.
El pueblo es pequeño, y lo más interesante es su puerto, con mucho movimiento de pescadores y una lonja que se ve que debe de tener bastante actividad. Alrededor se ven muchas tiendas de pescado, restaurantes, la calle principal, parque, iglesia... El puerto es muy bonito como podeis ver en la foto, y enfrente se encuentra el "Ireland's eye", una pequeña islita deshabitada cuyo nombre proviene de tiempos Celtas.
Una vez dada una vuelta al puerto, visto el faro y observar las relajantes vistas: de los rompeolas, el Ireland's eye, casitas cercanas a pequeños acantilados de la zona... nos volvimos hacia la parte de la lonja, caminando por el parque junto al puerto, y llegando hasta el muelle principal donde pudimos comprobar que ¡¡¡¡había focas!!!! Ya lo habíamos leído por ahí pero siempre impacta, verlas tan cerca, en libertad y en esa zona. Se movían mucho y reaccionaban a la gente que las miraba de forma muy atenta esperando que les echasen comida, imagino que quizá pescado, que puede que también pillen de vez en cuando de las sobras de las lonjas o algo así.
Tras ese paseo nos volvimos y fuimos a por un fish & chips, a cosa así de las 18:30 (estamos adoptando las costumbres de comidas de ellos según nos dé jeje), a un Beshoff Bros cercano, que cojimos y nos comimos en un banco del parque.
La noche empezaba a caer y decidimos que no íbamos a darnos más vueltas por alli, ya volveremos con vosotros, ávidos lectores del blog, más pronto que tarde. Así que decidimos hacer algo productivo, cogimos el bus de vuelta al city centre y nos fuimos a por una, tan ansiada y esperada, Guinness en Temple Bar, porque aunque no os lo creáis, todavía no habíamos pasado por Temple Bar a tomarnos una. Y que sepáis, ávidos lectores, que también iremos con vosotros, o igual no porque... ¿a vosotros esas cosas no os gustan no?
Una semana más, el reportero más dicharachero se despide, para acostarse pronto y afrontar con muchas ganas una nueva semana en la que a ambos nos esperan muchas sorpresas, ( esperemos que buenas aunque no hayamos visitado al señor). Let the peace be with you.
3 comentarios:
Muy bonito, nene y las fotos... ah, son buenas. ¡Parecen que fueran mías!
Besos.
Joo qué envidia! Me alegro de que os lo esteis pasando tan bien, que no todo tiene que ser filtros jeje. Las fotos son fantásticas, a ver si poneis más!
Un besillo!
¡¡ Pero dónde vas con gorra por la noche !! Jajajaja.
Bueno muy bien adoptar las costumbres que os interesan (fish & chips, cervecita de la buena... jaja). ¡¡ Qué envidia !! Pero vamos, que a mí la cerveza no me gusta, ni a nadie por estos lares...
¿Focas? Vaya... No lo sabía.
Qué fotos, qué paisajes, qué todo...
Seguid disfrutando (y currando) =)
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